SUELOS I: LA PIZARRA.

En Gerena convergen tres comarcas, cada una de ellas con su propio tipo de tierras: la sierra , el aljarafe y la rivera del Guadalquivir; por eso este pueblo tiene campo, aljarafe y monte.
El campo es arcilloso y arenoso. El aljarafe es más calizo. El monte es granítico y pizarroso.
¿ A qué se debe esta diversidad de terrenos y paisajes?. Nuestro pueblo y su término se hallan en la zona de contacto entre las formaciones graníticas de la región montañosa del noroeste de la provincia de Sevilla y los sedimentos de la era terciaria del periodo miocénico, que se extiende al pié de Sierra Morena, paralelos al Guadalquivir.
Hace millones de años este suelo se estructuró así, las evoluciones geológicas en la formación de la tierra, las imponentes fuerzas telúricas, los plegamientos del subsuelo y las erupciones volcánicas conformaron el horizonte y el panorama actual de nuestros campos y montes.
Vamos a detenernos un poco en el análisis de los principales componentes de este suelo tan diverso: esta entrada se la dedicaremos a la pizarra, proximamente hablaremos del granito, la caliza, la arcilla y la arena.
Lo más antiguo del término de Gerena, por lo que se refiere a su formación es el terreno pizarroso. La pizarra, de la que existe en el monte gran cantidad y variedad en color y dureza, es una roca homogenea de grano sumamente fino, que se divide con facilidad en hojas planas y delgadas. Procede de una arcilla del periodo secundario, metamorfoseada por las acciones telúricas. Lo normal es que aparezca en bloques que emergen del suelo en planos inclinados y perpendiculares, cuando su formación tuvo lugar en un plano horizontal de sedimentación y a mucha profundidad de la superficie actual. Los plegamientos alpinos con sus fuerzas tangenciales las hicieron elevarse de la forma que hoy vemos.
La pizarra es la roca que más abunda en esta sierra andaluza, le da a sierra morena ese color pardo, y ese carácter duro y seco.