El gallipierno o Macrolepiota procera es la seta de mayor tamaño de nuestro país, tiene un sombrero que puede alcanzar 30 cm de anchura y un pie que llega a los 40 cm de altura. Cuando sale el sombrero tiene forma de huevo cerrado sobre el pie. Después se abre, se extiende y se aplana. Tiene color terroso, con escamas más oscuras levantadas por el extremo, parece la piel de una serpiente.
Puede localizarse en praderas, prados poco cuidados, bosques y matorrales con mucha materia orgánica, siendo más frecuente en sitios con abundancia de herbívoros salvajes o domésticos por crecer su micelio en el terreno abonado rico en nitrógeno. Sirve a su vez de alimento para animales como los ratones de campo o los conejos, que roen el sombrero, también ciertos insectos micófagos instalan sus puestas en la seta para que esta sirva de alimento a sus larvas.
Es un comestible muy apreciado, salvo el fibroso y duro pie, consumiendose los sombreros, que en los pueblos se preparan empanados como filetes o la plancha. Hay que evitar recoger gallipiernos con sombreros menores de 10 cm porque se puede confundir con la lepiota cristata que es muy tóxica y se parece a un gallipierno en miniatura.
La canaleja. Diciembre del 2008.
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